Capítulo XVIII -aaa -
URUGUAY, Montevideo, marzo de 2021
(segunda parte)
Cuando nos abocamos a desentrañar los aportes científicos relacionados con el agua y el ciclo hidrológico sentimos la más noble sensación de “ser mancillados” por los profesionales relacionados. Catedráticos que nos apabullan desde los grados más altos formateados y aprobados por las Facultades y Universidades de gran parte del mundo. “Sabedores” cuestionados y descontinuados por las prácticas, comportamientos, exigencias, y enseñanzas de la Naturaleza. La realidad, así ¡lo confirma!
Tenemos la sensación de andar trajinando intelectualmente por los tiempos pasados de la Santa Inquisición (1184-1600). Comprobamos que la mayoría de las Universidades y Facultades asumen las teorías del agua y su ciclo hidrológico en sus dictámenes finales como lo hacía la Iglesia históricamente amparando la ignorancia y la ignominia detrás de la cruz y la Biblia, aplicándolos inquisidoramente como conocimiento indiscutible de los “sabios eruditos” mandatados por dios. ¡Ahora! por la única razón de estar acreditados con un diploma universitario en sustitución de la cruz y la Biblia, lo que ¡no admite! dudar y menos cuestionar a la ciencia universitaria. ¡Otra vez!, la ignorancia nos conduce a la umbra.
Las interpretaciones sobre los funcionamientos de la Naturaleza y sus resultados y consecuencias no tienen aún propuestas serias de soluciones por parte de los especialistas de todo tipo relacionados con los temas del agua. No se avizoran sobre el horizonte mediato universal planteos/propuestas para equilibrar las interrelaciones con la Naturaleza en un nuevo espacio medio ambiental ecológicamente útil que comience a diseñar rápidamente las estrategias para las construcciones de las soluciones válidas para todos.
Estamos obligados a protestar con vehemencia ecuánime porque los tiempos se acortan y cada día que pasa los malgastamos con intercambios mentirosos de medios ambientes economicistas, ecológicamente rentables. Los problemas crecen y se complejizan agrediendo las vidas parametrizados por una constante aceleración se multiplican los conflictos de todo tipo en las direcciones críticas violentas para las supervivencias sobre el Planeta.
Las urgencias para adaptarnos por el Cambio Climático – Calentamiento Global nos obligan a sacudir los anquilosados conocimientos sustentados por los profesionales del agua, tarea que hacemos consecuentemente desde hace más de veinte años, con: Organismos Internacionales (varios); Gobiernos; políticos fanfarrones y miopes; Ministerios especializados que teóricamente “hacen aguas”; Catedráticos “mojados por la ignorancia”; ingenieros hidráulicos e hidrodinámicos que no conocen los ciclos de la Naturaleza; y otros similares. Todos los que, de una u otra forma tienen que reformatear sus conocimientos científicos sobre el agua, como humildes intérpretes de la Naturaleza. Estamos cansados de sus diatribas y trataremos de aportar los conocimientos que nos enseña la Naturaleza.
NOS OBLIGAMOS, A: BORRÓN Y CUENTA NUEVA, EL AGUA ¡TIENE MEMORIA!
En los siglos XI y XII se producen grandes cambios en los pensamientos de los investigadores y científicos en los temas relacionados con los conocimientos en general, y en especial con el agua, sobre todo en Francia, Italia, e Inglaterra. La religión cristiana es aristotelizada por Tomás de Aquino, incorporando a las Universidades Cristianas las ciencias y artes griegas, como, la: matemática, geometría, astronomía, lógica, gramática, retórica, y música. Estas imponentes innovaciones de los conocimientos del desarrollo de la inteligencia humana para esa época, produjeron un salto de características desconocidas que aceleraron un cambio monumental en los estilos de vida de los centros urbanos de los países de la Europa medieval.
Con el Renacimiento irrumpe una notable forma nueva en las percepciones científicas que comienzan a formatear otras corrientes del empirismo ecológico/medio ambiental impulsadas e impuestas por Leonardo da Vinci (1452-1519), polímata de origen florentino, destacado renacentista Italiano, quién fue al mismo tiempo: científico; ingeniero; arquitecto; inventor; urbanista; escultor; paleontólogo; anatomista; botánico; ecologista; filósofo; pintor; escritor; músico; artista; poeta; y otros. Sus conocimientos fueron muy destacados para la época entre sus antecesores y contemporáneos. Su principal aporte (que en cierta medida ha pasado inadvertido) fue su método de análisis que demuestra rigurosamente su lectura de la Naturaleza, y desde ella repetidamente lo comprueba con experimentos afines para demostrar científicamente que la Naturaleza se comporta y hace por afuera del ser, a ¡su forma!
Éste método impuesto, probado, y comprobado por Leonardo da Vinci fue de gran utilidad para los estudios posteriores que realizó de los fluidos y en especial del agua. Al analizar descubrió: el principio fundamental de la mecánica de los fluidos; el de la continuidad, o conservación de la masa; que la velocidad de un fluido confinado es inversamente proporcional a la sección transversal; la generación de ondas; los vórtices (remolinos); los flujos turbulentos, y otros. Si bien hizo las comprobaciones deductivas infinidad de veces, nunca llegó a descubrir ! que el agua ¡tiene memoria!
Posterior a Da Vinci irrumpe Galileo Galilei (1564-1642), quien, con sus aportes teóricos reformatea los conocimientos científicos reformulando la mecánica de los fluidos como ciencia desde la crítica de la metafísica escolástica. Galileo se apoyó en el método de la experimentación comprobada que impusiera Leonardo para introducir las matemáticas en explicación de los resultados de la práctica empírica, determinando que se dejaba de lado los comportamientos de la Naturaleza por afuera del ser, para fundamentarla incorrectamente a partir de la ciencia académica. Mojón estratégico de los conocimientos que hizo predominar la histórica desviación de la inteligencia humana imponiendo matemáticamente los funcionamientos a la Naturaleza. No comprendieron que ¡Primero!, hay que leerla ecológica - medio ambientalmente en sus ciclos, y ¡no! describirla con números.
En el mes de agosto del año 1665 se desató una pandemia de peste negra que obligó al físico, teólogo, inventor, alquimista y matemático inglés, Isaac Newton (1643-1727) a cuarentenar durante dos años en su aldea natal (Woolsthorpe). En este período fundamenta científicamente: el cálculo infinitesimal; la mecánica y la gravitación universal; y la teoría de la luz y los colores. Teorías contra la “Cosmología Cartesiana” que se enmarcan dentro de una gran revolución científica del siglo XVII, fundamentadas sobre un Universo real que debía ser explicado solamente en términos de sus constitutivos y sus interrelaciones observando sus comportamientos en la Naturaleza, lo que realizó con formulaciones matemáticas en su libro“Philosophiae Naturalis Principia Mathematica”, (1687).
La demoledora crítica a la “Cosmología Cartesiana” que presentó Isaac Newton como “sistema del mundo real” proporciona un valioso estudio teórico experimental de los fluidos sobre los vórtices y el origen y funcionamiento de la fricción interna de una conducción, aportando la definición de la viscosidad. En los años subsecuentes (1750-1850) se conformaron las bases teóricas de la Mecánica de los Fluidos, siendo este período de la historia de los conocimientos sobre los fluidos donde se logran sintetizar las teorías que se argumentaron durante siglos. Las conclusiones que se extraen de tan compleja síntesis es porque se priorizan los formulismos matemáticos que tratan de explicar lo inexplicable para la Naturaleza, y no se tienen en cuenta sus ciclos, los que permiten predecir científicamente cada secuencia que mueve una parte del gran todo.
En éste especial período histórico de la Europa medieval se conjuntaron al mejor estilo sindémico varios procesos sociales como conflictos que explosionaron violentamente por las grandes hambrunas y extremas pobrezas masivas imponiendo irruptoramente un nuevo reordenamiento de los sistemas políticos/económicos instrumentando al capitalismo egoísta con la Revolución Francesa (14 de julio de 1789). Este hito estratégico para la humanidad produjo un profundo viraje en los estilos de vida en el mundo, componiendo un orden cualitativo diferente de los sistemas de producciones y servicios adaptándose a las exigencias que imponía la ingobernable explosión demográfica/civilizatoria (≈±1.500 millones), desatando la primera revolución industrial con la electricidad y los motores a explosión, a partir del carbón, y el petróleo y sus derivados.
Éste viraje histórico abrió paso a la destrucción sistemática de la Naturaleza con los cambios en losestilos de vida. A partir de este período las ciudades crecieron intempestivamente obligando a crear imponentes sistemas, de: represas, acueductos, y drenajes, instrumentando servicios urbanos de usos colectivos. Estos formidables cambios de las condiciones estructurales de las ciudades impulsaron las nuevas necesidades en las conducciones de aguas introduciendo los sistemas cerrados a presión que requirieron de las teorías hidrodinámicas, de: conducciones; confinamientos; viscosidades; vórtices; turbulencias,; y otros. La energía hidroeléctrica fue inventada (1880) -en plena Revolución Industrial-, por el ingeniero civil británico, John Smeaton, quien inició la construcción de grandes ruedas hidráulicas de hierro colado, como las primeras turbinas.
Al mismo tiempo se construyeron inmensos complejos fabriles/industriales capitalistas, que impusieron, la ...”explotación del humano por el humano, a partir de la propiedad privada”, abriendo la nefasta grieta histórica política/social, de que: ...”pocos ricos, produjeran muchos pobres, ¡muy pobres!”, y en paralelo -al unísono-, fueron desatadas masivamente las depredaciones de la Naturaleza con las suciedades y contaminaciones de todo tipo, y las explotaciones devastadoras de estratégicos recursos finitos.
LAS TEORÍAS: HIDRÁULICA E HIDRODINÁMICA SE ENREDARON, ¡MOJÁNDOSE!
Lo increíble de este hito histórico, es que, ninguno de estos científicos actuantes nunca asumieron que la Naturaleza con la memoria de sus ciclos es la que produce y reproduce los hechos, lo que, deberían interpretar científicamente. La realidad comprobada, es que, no admitieron a la Naturaleza (ni siquiera la nombran), y hasta asumen sus errores teóricos inteligentes amparados a las sombras de sus títulos universitarios. Ésta desviación negacionista, impuesta durante largos siglos, para no admitir a la Naturaleza por afuera del ser, fue “obligada inquisidoramente” por las religión cristiana, condición que trajo aparejada y posicionó un brutal retraso en los conocimientos de la hidrodinámica, hasta el día de hoy.
Desde este período se anularon los pensamientos científicos ecológicos-medioambientales, siendo la viscosidad de los fluidos el eje de las discordias. Si bien aparece como una singularidad teórica de “poca monta”, la realidad histórica demuestra la inmensa importancia que este “entredicho teórico” tuvo y tiene para los devenires de la civilización humana. Desde esta realidad teórica se consolidaron las desviaciones académicas argumentadas desde fórmulas matemáticas que fueron aplicadas para no fundamentar, ni reconocer los funcionamientos de la Naturaleza.
Es aquí que se entrecruzan la hidráulica con la hidrodinámica produciendo el ”chisperío histórico” en la Teoría de los Fluidos dónde las confusiones y omisiones dieron paso a los grandes errores “justificados por las culpas”. Al recobrar los fundamentos teóricos del matemático suizo, Leonard Euler (1707-1783), quién había establecido que la suma de tres cantidades es igual a una constante, (A+B+C= constante), lo que definió como: ...”el principio de la conservación de la energía para todos los fluidos”, Bernoulli reconoce su error teórico, ¡pero!, no lo corrige, fundamentando aviesamente, que: la constante queda definida, entre: A=energía cinética, B=energía potencial, y C=la entalpía.
El ingeniero y físico francés Claude-Louis Marie Henri Navier (1785-1836) desarrolló las teorías en el campo de las matemáticas aplicadas a, la: ingeniería de construcciones, la elasticidad de los líquidos, y la mecánica de los fluidos a partir de integrar la viscosidad en los fundamentos relacionados con las conducciones de aguas, reformateando la teoría hidrodinámica, la que publica en el año 1822. A partir de su propuesta los fluidos ideales (invícidos) se transforman en viscosos y comienzan a interpretarse y fundamentarse de forma diferente con los aportes, de: Daniel Bernoulli (1700-1782), y de Jean Rond d’Alembert (171-1783) quienes formularon las ecuaciones básicas y los principios de la Mecánica de los Fluidos.
Desde este período, hasta nuestros días la incorrecta interpretación académica de la Naturaleza ha permitido un intenso intercambio teórico entre los científicos hidráulicos y los hidrodinámicos en formidable enredo de ilegibles fórmulas para las matemáticas aplicadas. Para corrección de ésta barahúnda surge el gran matemático y físico irlandés, George Gabriel Stokes (1819-1903) quién artera/inteligentemente reformula las ilegibles fórmulas para los números, y partiendo de ellos como resultados posibles, moderniza los “formulismos imposibles”. Así nacieron las Ecuaciones de Navier Stokes, y se catapulta a Reynolds con “su número propio” en una paradojal oferta científica de la Dinámica de los Fluidos Viscosos.
AÚN USAMOS LAS TEORÍAS QUE NO EXPLICAN LOS HACERES DE LA NATURALEZA
La interpretación del ciclo hidrológico de acuerdo a los funcionamientos de la Naturaleza es la esencia que nos permitirá recomponer tantos siglos de aportes teóricos buenos y malos sobre los fluidos, a lo que, tenemos que abocarnos de inmediato para diseñar las soluciones estratégicas obligadas y poder adaptarnos rápidamente al Cambio Climático – Calentamiento Global, para lo cual, ¡no queda mucho tiempo!.
Partimos del año 1971, con los científicos: David Rouelle, (20 de agosto de 1935),físico-matemático belga,y el matemático holandés Floris Takens, (1940-2010), quienes definieron una nueva teoría de la turbulencia viscosa basados en el descubrimiento de Hendrik A. Lorentz (1853-1928), físico neerlandés galardonado con el Premio Nobel de Física del año 1902. Esta teoría fue fundamentada a partir de las ecuaciones de Navier-Stokes, asumiendo la dependencia a partir de las condiciones iniciales en que se encuentra un líquido, definiendo que: ...”todo lo que le pasa a un fluido, depende de los detalles de su estado y constitución inicial”. Afirmando que los fluidos tienen memoria y vuelven siempre a su estado inicial.
El ciclo hidrológico es un proceso biogeoquímico electrónico de la Naturaleza de conformaciones estructurales cerradas por alternancias de la materia en movimiento, que cambia secuencialmente sus estados físicos, sin variar su conformación atómica. Ésta particularidad de la Naturaleza está permitida y se rige por tres condiciones estratégicas externas que los regulan: la gravedad, la temperatura y la presión.
Las primeras lecturas empíricas se concibieron por los movimientos de la Naturaleza a partir de los estados físicos cambiantes del ciclo hidrológico, desde: líquido, vapor y hielo. Proceso continuo, donde la evaporación al condensarse se recompone,como: lluvia, rocío, nieve, y granizo para precipitarse sobre todo el globo terráqueo, formando lluvias, con: tormentas; tornados; ciclones;ríos, riachuelos; arroyos; lagos; lagunas; bahías; estuarios; mares; e infiltraciones a los subsuelos; así como grandes zonas heladas conformadas por enormes superficies de hielos perennes.
Durante cientos de miles de años los ojos, la memoria, y la deductiva humana fueron captando como constantes que sus repeticiones secuenciales se sucedían a partir de los factores externos, condiciones que le permitieron predecir los climas y sus ciclos. Desarrolló la Teoría Hidrológica para describir y diseñar este comportamiento de la Naturaleza, formulando las explicaciones que dieron base y sustento a las ciencias quese desarrollaron hasta el presente. Sus tesis son aplicadas a partir de los movimientos naturales abiertos que se producen, sin la intervención humana.
La Hidrodinámica es la teoría que explica y fundamenta a los fluidos confinados dentro de artilugios fabricados por la inteligencia humana, los que se mueven y trasladan como flujos en tuberías dentro de reglas físicas dinámicas condicionadas por las formas contenedoras y sus interrelaciones visco dinámicas del fluido en movimiento. Ésta particularidad impuesta por la inteligencia humana a partir de sus necesidades de adaptaciones junto con el ciclo hidrológico de la Naturaleza produjo la mala lectura predictiva que hicieron los científicos con sus fundamentos teóricos, ”empantanándose” en sus concepciones hidrodinámicas opacando/anulando una nueva visión dinámica medioambiental para las conducciones fluídicas, como el agua.