Existen al menos dos tipos de coagulaciones encontradas a causa de la vacuna Covid-19.
El primero, son las coagulaciones de sangre propias de cualquier vacuna, debido a la estimulación excesiva del sistema inmunológico con la inyección de tóxicos, según explicaba el doctor Andrew Moulden en 2013
Y el segundo tipo de coágulos, no son de sangre, como los descubiertos por embalsamadores alrededor del mundo: un material fibroso, color blancuzco, parecido a una liga de hule, lo cual se muestra en el reciente documental “Suddenly dead” (“Muerte repentina”, ver AQUÍ).
https://screencast-o-matic.com/watch/c3X0DKVU47u
Ambas coagulaciones bloquean el libre tránsito de sangre en las venas y, sobre todo, en los vasos capilares más finos, como los del cerebro, lo que provoca falta de oxígeno (“anoxia”) e inflamación de los tejidos que recubren el cerebro o la médula espinal (“meningitis”), así como muchas otras enfermedades. Ante este problema, muchos pacientes de la supuesta pandemia de covid-19, han sido tratados con respiradores, como si se tratara de un problema respiratorio, cuando la evidencia indica que es un problema circulatorio. Es decir, no se ataca el verdadero problema y el respirador no está resolviendo nada, hasta que el paciente muere. Pero no se han permitido autopsias que permitan descubrir las causas.
Han tenido que ser los embalsamadores en todo el mundo, quienes han dado a conocer los extraños coágulos, que no conocían. Y son los médicos que no están enganchados al sistema médico oficial, los que pueden hablar más libremente del tema.
Y lo que puede ser chocante, es que otros investigadores que ni siquiera son médicos ?o gracias a ello?, también expliquen la verdad de lo que estápasando. La mentira está exasperada. El cuarto poder de los medios, y todos los poderes juntos, están siendo derrotados por el poder popular, que desobedece al estilo del anarquista mexicano Ricardo Flores Magón.
Kgosni-elvolador, editorial 1 dic 2022 Papantla, Veracruz México
Por Claudio Colombo Convergencia Socialista
En la mayoría de las situaciones en que ciertas fracciones de la burguesía se pelean entre sí, los revolucionarios y las revolucionarias no tomamos partido por ninguna de estas, sino que hacemos todo lo posible para que estas rencillas las debiliten a todas. Esto no es otra cosa que llevar hasta las últimas consecuencias las recomendaciones de nuestros maestros, que decían que las luchas en las "alturas" facilitan el accionar de "los y las de abajo".
Una excepción, relativa, a esta regla es cuando el régimen democrático burgués corre peligro de ser cambiado por otro de características dictatoriales o bonapartista, mediante un golpe de estado, como el del 76, o de grandes movilizaciones nazi fascistas, como las que tuvieron lugar en Alemania e Italia en la década del 30 del siglo pasado. Frente a ese tipo de circunstancias, hacemos lo que recomendaba Trotsky: impulsamos el frente único con todos los sectores -incluso burgueses- dispuestos a defender las libertades democráticas, por más limitadas que estas sean.
Sin embargo, nada de esto sucedió durante el juicio por corrupción contra Cristina Fernández y otros personajes de la banda que lidera la actual vicepresidenta. ¡Ninguna libertad democrática estuvo o está en juego debido a las consecuencias de este proceso, que no es otra cosa que la expresión judicial de las rencillas entre camarillas de representantes patronales! Lamentablemente, partidos de izquierda, como el PTS y el Nuevo MAS, entendieron todo lo contrario, alineándose en los hechos con el kirchnerismo, en la defensa de CFK.
Algo parecido sucedió luego del atentado contra Cristina, ya que estas mismas fuerzas tuvieron posicionamientos parecidos, a tal punto que el NM llegó a movilizar junto al PJ a la Plaza de Mayo denunciando al "peligro fascista”. Lo peor que les puede pasar organizaciones que se reivindican socialistas y revolucionarias, es perder, en este tipo de circunstancias, la independencia política de clase, que es lo que está sucediendo con el Nuevo MAS y el PTS.
De ser consecuentes con este tipo de planteos, en una eventual segunda vuelta electoral entre el Frente de Todos y Milei o Bullrich -a quienes tildan de “fascistas”- no tendrían ningún prurito en convocar a votar contra el “fascismo”, lavándole la cara a quienes, durante más de 30 años, han venido imponiendo los peores planes antiobreros y antipopulares. De hecho, y utilizando este mismo razonamiento, estos grupos vienen de llamar a votar a Lula contra Bolsonaro.
Las conducciones de estos partidos deben replantearse todo esto, que van en contra no solo de los principios revolucionarios, sino del nivel de consciencia de la clase trabajadora, que ha roto con el peronismo y se prepara para librar combates excepcionales. Para disputar la conducción de estas luchas, la izquierda tiene que delimitarse -de manera total y absoluta- de las fuerzas de la burguesía, especialmente de sus fracciones populistas o “izquierdistas”.
Por Damián Quevedo
Finalmente salió el fallo sobre la causa "Vialidad", con una condena simbólica a la vicepresidenta Cristina Fernández. Decimos simbólica, porque en definitiva es eso, un fallo testimonial, ya que faltan varias instancias judiciales para que quede firme y, además, porque todavía queda la posibilidad de un indulto presidencial.
Ante este suceso, como otros vinculados a la suerte de la vicepresidenta, es realmente preocupante la posición que asumen algunos partidos de izquierda, como el nuevo Mas o el PTS, que, en los hechos, se solidarizaron con Cristina Fernández.
La Izquierda Diario, del PTS, publicó varias notas luego de que se diera a conocer el veredicto, en las que, con mayores o menores pruritos, hace una defensa elíptica de la jefa de la banda kirchnerista, definiendo al fallo como una condena que muestra el objetivo proscriptivo de una casta judicial que no votó nadie, pero busca decidir de forma antidemocrática quién puede ser candidato y quién no; a quién se puede votar y a quién no. En este marco, Cristina Kirchner -bajo cuyos gobiernos sí hubo corrupción, al igual que bajo todos los gobiernos capitalistas [1]
Con estas aseveraciones, los compañeros del PTS olvidan dos cuestiones fundamentales de la sociedad en la vivimos. Una, tiene que ver con que, en este régimen, los capitalistas siempre deciden en forma antidemocrática, ya que no es otra cosa que una dictadura de clase, en la cual, por más que se alternen entre dos o más partidos patronales, todos tienen la misma política.
La otra cuestión que olvidan, es que si bien es cierto que todos los gobiernos capitalistas son corruptos per se, es deber de los revolucionarios denunciar -en concreto y principalmente- a quienes ejercen el gobierno en este momento, lo demás es una generalización que elude la definición necesaria, en este caso sobre Cristina Fernández.
Por esa razón, cuando desde el PTS dicen, que, "bajo su gobierno hubo corrupción", no dicen que Cristina es corrupta. Esta es una diferencia sustancial, un equívoco que un revolucionario no se puede permitir, porque los socialistas le hablamos a la clase obrera, que tiene absoluta claridad sobre la corrupción kirchnerista, el el papel que jugaron en ese sentido, tanto Néstor como Cristina.
Para finales de 2003, tras el primer año en la Casa Rosada, los Kirchner informaron un patrimonio neto $7.016.544, considerando las deudas y los créditos a favor consignados en sus declaraciones juradas. Cuatro años después, en diciembre de 2007, cuando Cristina Kirchner recibió la banda presidencial de manos de su marido, los activos del matrimonio habían ascendido a $25.537.371. La cifra representaba un aumento nominal de 264% [2]
Esto, sin contar los inmuebles adquiridos durante la última dictadura, el otro período en el que el matrimonio de Río Gallegos y el Calafate acumuló su cuantiosa fortuna. Como ya señalamos en notas recientes, los revolucionarios no debemos defender a ningún representante de las patronales, en medio de las disputas entre bandas capitalistas.
Debemos insistir en que tampoco habrá cárcel o proscripción para Cristina Fernández, porque los mejores representantes del capital y los más fieles servidores del imperialismo no van presos en esta sociedad, como sucedió con Carlos Saúl Menem. Los trabajadores y el pueblo tendrán que meterla presa, tanto a ella como a Macri y al resto de los políticos patronales que entregaron el país a los grandes monopolios.
Los socialistas debemos dejar en claro que solo habrá justicia cuando la clase obrera dirija la sociedad, y, con sus jurados democráticos juzgue a todos los capitalistas y sus representantes por décadas de crímenes cometidos en contra de los trabajadores.
[1] La izquierda Diario, 06/12/2022
[2] Infobae 05/12/2022
Por Juan Giglio 6/11/22
El encarcelamiento de testaferros de Néstor y Cristina Kirchner, durante el Macrismo, fue una “cortina de humo” montada para desviar la atención popular, mientras profundizaban la aplicación del mismo plan de ajuste y saqueo que antes impusieron con otro relato o verso. Además, esta ofensiva contra la ex presidente, fue y es la punta del iceberg de una brutal disputa entre los capitalistas, que se matan por una porción de la torta, que, debido a la crisis, es cada vez más chica.
Los revolucionarios debemos asumir que esta realidad, que seguirá dando lugar a durísimas peleas interburguesas, debe ser aprovechada por el movimiento de masas para pelear contra los de arriba, que están más débiles que antes. Por eso no reclamamos la libertad de los De Vido, Báez, Jaime, López y compañía, ni nos lamentaremos frente a un eventual encarcelamiento de la mismísima ex presidenta. ¡Que se maten entre ellos, esa no es nuestra causa!
Mientras tanto, seguiremos agitando la necesidad de crear otro tipo de justicia, que vaya a fondo contra toda la corrupción capitalista, que no perdone a ninguno de estos tránsfugas. Para eso, hacen falta tribunales obreros y populares, que impongan castigos ejemplares a Cristina, Macri y todos los que forman parte de sus “bandas”. ¡Que se pudran en la cárcel y sus bienes pasen a formar parte del patrimonio público!
Estos jurados tendrán que meter mano en una de los hechos más graves de corrupción de la historia, la creación y el posterior crecimiento de la fenomenal deuda externa, que este gobierno incrementó a partir del escandaloso acuerdo con el FMI. Sobre esta ya existe un valiosísimo antecedente judicial, el fallo del Juez Jorge Ballestero, que en 2000 determinó su carácter fraudulento, tomando como pruebas las denuncias e investigaciones realizadas por Alejandro Olmos:
“La deuda externa de la Nación ha resultado groseramente incrementada a partir de 1976 mediante la instrumentación de una política económica vulgar y agraviante que puso de rodillas al país a través de los diversos métodos utilizados, que tendían, entre otras cosas, a beneficiar y sostener empresas y negocios privados –nacionales y extranjeros– en desmedro de sociedades y empresas del Estado”.
Solo por esta razón -¡Existen muchas más!- todos los funcionarios cipayos que hipotecaron y siguen hipotecando el presente y futuro de nuestro país, entregándoselo a las grandes corporaciones financieras internacionales, deben ser juzgados y castigados con las penas más duras. Los próximos combates obreros tienen que incorporar, como parte de sus reclamos, esta exigencia elemental.
José Antonio Vera, desde Asunción
02.12.2022 - UyPress –
Algunos estudiosos sostienen que Paraguay, en tanto nación socialmente avanzada en la mitad del siglo XIX, ha perdido su identidad y, aún más categórica y profundamente, el sentido de pertenencia, la característica más saliente del Ser Nacional Paraguayo, de hondas raíces guaraníes y de vigorosos principios comunitarios.
Todo ello fue destruido durante la Guerra de la Triple Alianza, 1864/70, ordenada y financiada por el imperio inglés y ejecutada por los ejércitos de Argentina, Brasil y Uruguay.
De aquella ejemplar obra política, del único pueblo del subcontinente que consolidó una República Independiente del colonialismo español, entre 1813/64, hoy no queda nada y la descomposición moral de la dirigencia estatal y privada, extendida a buena parte de una población que, de rebelde se ha vuelta sumisa, asienta sus reales en la impunidad que ampara a los grandes delincuentes, y faculta la escalofriante corrupción imperante que, las voces corrientes llaman narcopolítica.
Un siglo y medio nos separa de aquel genocidio. El exterminio fue de cientos de miles de paraguayos, y en las tierras ocupadas, deambulaban los restos de viejos heridos y enfermos, abuelas que daban de comer con raíces a los pocos sobrevivientes, en su mayoría, niños escuálidos. Las mujeres jóvenes, fueron secuestradas por brasileños como botín de guerra, al igual que los hombres llevados en condición de esclavos a las zafras de los países vecinos. Muchas canciones del mejor folklore regional, homenajean a los mensú.
El territorio paraguayo fue reducido en 160 mil kilómetros 2, ocupados casi 70 mil por Brasil que, a su vez, aseguró su presencia formando e instalando en el gobierno al Partido Colorado, al tiempo que Buenos Aires diseñaba al Partido Liberal, y se apropiaba de más de 90 mil kms2, parte del Chaco y la Provincia de Misiones.
Ambos partidos nacieron después de década y media de terminada la Guerra Infame, y se han alternado en la administración del país, con amplia ventaja colorada, frente a una cómoda suplencia liberal, sin vocación de poder, salvo cortas excepciones. En los últimos 75 años, el Partido del General Alfredo Stroessner, cuya imagen adorna la sede central y todas las seccionales del país, sólo perdió el predominio entre 2008 y 2012, durante el gobierno progresista del exObispo Fernando Lugo.
De la ejemplar República Soberana e Independiente, estructurada sobre los principios de igualdad social, cuya floreciente economía tenía su primer fundamento en el desarrollo cultural, a partir de la alfabetización de todos los habitantes, priorizando la producción agropecuaria, desde pequeñas y medianas ocupaciones de tierra por familias indígenas y campesinas, hasta las estatales Estancias de la Patria, el gobierno de Gaspar Rodríguez de Francia, supo edificar la estructura social más justa, equitativa y avanzada de todo el subcontinente americano hasta el medio siglo que acabó la invasión ordenada por el imperialismo inglés. Como muchas cosas cambian, hoy el imperio es norteamericano y la bloqueada es Cuba, el Paraguay de ayer.
MORIR "CON LA PATRIA" O "POR LA PATRIA"?
Esa nación, singularmente avanzada, de fructífera política social, fue obra de la Junta Patriótica encabezada por quien fue nombrado y asumido como el Dictador Supremo (dejando en claro que no es lo mismo dictador que tirano o déspota). A la muerte de Francia, en 1840, ejerció con lealtad durante 20 años, Carlos Antonio López, a quien sucedió su hijo, el Mariscal Francisco Solano López, Comandante del ejército que durante seis años, combatió heroicamente al trío invasor, financiado y, a la vez, endeudado por Londres.
La mayoría de los historiadores paraguayos difieren acerca de lo que habrían sido las últimas palabras que pronunció en medio de las tupidas selvas, el joven mandatario. Algunos dicen que su grito final fue "Muero por mi Patria" y otros, más creíbles, si se estudia la realidad actual de Paraguay, sostienen que el Mariscal dijo "Muero con mi Patria".
Aquella Patria no existe desde hace décadas, y cada día se aleja más con sus virtudes de honradez y equidad social, sepultada por el dinero mal habido que es el primer actor de la actividad política, en particular en estos días, a sólo tres semanas de las elecciones internas de los partidos, que definirá al candidato colorado y al de la Concertación, una heterogénea alianza de 18 emblemas, para las presidenciales de abril próximo. También deben salir nominados los futuros gobernadores, senadores y diputados.
Los colorados postulan a dos. Uno es Santiago Peña, candidato del poderoso empresario Horacio Cartes, expresidente, calificado de "significativamente corrupto" por Estados Unidos. Su contrincante interno, aunque abrazados, es el oficialista Arnoldo Wiens, exMinistro de Obras Públicas, salpicado en sesudos chanchullos y premiado con su postulación.
Los contratistas, que operan en la construcción del Puente Chaco, reclaman 42 millones de dólares al Estado. Dos inmensas columnas apuntan hacia el cielo en medio del Rio Paraguay, a la espera de que llegue la ruta suspendida en la mitad, a sólo 50 metros. En el gobierno de Cartes se produjo una estafa similar, con un proyecto de Microbús, a cargo de Jiménez Gaona, antecesor de Wiens. La empresa portuguesa contratada, demanda al Estado por 57 millones de dólares, cuando ni escombros quedan de lo que pudo ser. Sus autores?. Impunes.
NI LA EMBAJADA USA TIENE UN CANDIDATO POTABLE
Tan singular es Paraguay en la mediocridad del pensamiento y la acción política, que confunde hasta a los diplomáticos de EEUU que, por primera vez en la región, no pueden aplicar su habito de poner dos canastas con huevos durante la campaña electoral, para ir viendo a quien apoyar en virtud de su obsecuencia con el imperio.
Una hipótesis nada alocada, que anida en el intestino colorado, anticipa que Wiens sería catapultado ganador de las internas, a efectos de que Cartes, el verdadero Patrón del partido, sea ungido presidente de esa organización y, por ende, se convierta en el mandatario de facto del Estado. Wiens, uno de los pocos políticos que sabe pronunciar un discurso y tiene cierto dominio de la imagen porque dirigió durante unos años documentales televisivos, es un personaje puesto en la política a pesar de su comprobada ignorancia. Según él, el elegido "será ungido por Dios", así como hace cinco años, comparó a Cartes con Nelson Mandela "por su profundo humanismo". Ahora están enfrentados pero abrazados, total, la impunidad abastece todos sus placeres.
Ese potable jefe del Ejecutivo, es de origen menonita, secta cerrada para los paraguayos, convertida en un Estado en sí, exenta de impuestos y con electricidad barata, que impunemente explota a indígenas y ocupa parte de sus tierras. Varios de sus miembros han titulado cargos ministeriales y casi todos también han salido impunes de sus trapisondas administrativas. En el 2028, se cumplirá cien años de la llegada de los hijos de Menó. Podría darse que esa población, que excluye en sus relaciones sociales y familiares a los paraguayos, celebre su primer siglo en este territorio, con un presidente salido de las entrañas de su obscura, sectaria y medieval militancia religiosa.
La Embajada de Estados Unidos, en abierta injerencia, funge de controlador de la vida política paraguaya, pero aún no tiene candidato. Basta recordar que el número dos de esa sede, Marc Stanley, hace tres meses reclamó a la oposición que formaran una alianza. Semanas después, el titular Marc Ostfield, declaró que Horacio Cartes y el Vicepresidente del Ejecutivo, Hugo Velázquez, son "significativamente corruptos". Esa intromisión podría alimentar una segunda hipótesis. Hacer que Wiens gane la internas y que Abdo Benítez, sea colocado al frente del aparato colorado, en una jugada diseñada desde Washington, para debilitar enormemente a Cartes y dejarlo al borde de la extradición a EEUU, acusado de encabezar una organización regional delictiva de narcotraficantes y contrabandistas, entre otras perlas.
La Concertación, liderada por el Presidente del Partido Liberal, Efraín Alegre, llega resquebrajada a las internas, entre otras razones por su concepción privatista de la economía, por la ausencia de un proyecto de nuevo país y, también, por haber impuesto como compañera de fórmula a Soledad Nuñez, Ministra de la Vivienda con Cartes (2013/18), con un desempeño deficiente, sobrefacturación de precios en la construcción de viviendas, y desaparición de varios cientos de miles de dólares del presupuesto acordado. Ni siquiera cimientos hay de las 200 mil casas prometidas. Alegre jugará solo en las internas, ante media docena de postulantes intrascendentes.
Una tercera dupla que se ha lanzado al ruedo, y que no participa en las internas porque tiene un solo postulante, está encabezada por Euclides Acevedo, un auténtico danzarín de la política. Largo tiempo lideró al Partido Febrerista, aspirante fallido a socialdemócrata, y coqueteó con los liberales y con el Encuentro Nacional, hasta que fue ungido Gran Maestro Mason. Hace unos meses renunció al cargo de Canciller Nacional del gobierno colorado, del que fue Ministro del Interior con fuerte represión de las movilizaciones populares, y el arreo de indígenas y campesinos, con el pretexto de apoyar al Ejército del Pueblo Paraguayo (EPP), una entelequia guerrillera utilizada por el Estado y la rosca transnacional del agronegocio.. El médico Jorge Querey, de muy buena imagen popular, es su candidato a Vice y su única tabla de salvación.
Dentro de cinco meses serán las elecciones generales, en un contexto de perversión institucional. En el Tribunal Superior de Justicia Electoral, se produjo un incendio que acabó con ocho máquinas electrónicas, entre 24 alquiladas para controlar el sufragio. Un funcionario murió, y los fiscales nombrados para esclarecer el hecho, ningún informe han difundido, al tiempo que el desacreditado Presidente del organismo, aliado a Cartes, optó por renunciar, también él, beneficiado por la omnipresente impunidad.
DOMINGO LAINO ACUSA AL MINISTERIO PUBLICO
El veterano ex líder del Partido Liberal Radical Auténtico, Domingo Laíno, quien fracasó en dos ocasiones para llegar a la Presidencia de la República, afirmó este primer día de diciembre que tiene documentación grabada de que ese incendio fue provocado por la presidencia del Tribunal electoral, y acusó a la Fiscalía General de ocultar los informes periciales.
En Diputados ha fracasado, en un mes, cuatro intentos de juicio político contra la titular de ese organismo, Sandra Quiñones, también puesta en el cargo por presión de Cartes, sordo al repudio de los movimientos campesinos que reclaman la distribución de las ocho millones de hectáreas fiscales, ocupadas por latifundistas. Lo curioso con esa señora es que aparece acompañada por diplomáticos de EEUU, los mismos que califican de corrupto a Cartes, tutor de la Quiñones. Ahora se está repitiendo esa complicidad con el Presidente de la Corte Suprema de Justicia, Antonio Fretes, quien está saliendo ileso de las pruebas de comandar una organización familiar dedicada a montar financieras clandestinas, a extorsionar a propietarios e inquilinos de casas de clase media, y a un empresario árabe acusado de lavado de dinero, a quién un hijo del supremo ministro, le sacó 380 mil dólares, para evitar su extradición a EEUU, cosa que no ocurrió porque el hombre fue entregado.
El Presidente Mario Abdo Benítez sólo se ocupa de dos tareas: 1) viajar al exterior, para vender un país que no existe y 2) impulsar obras de carreteras, siendo propietario de una de las empresas más adjudicadas. La situación de los hospitales no puede ser más inhumana, el sistema educativo es tan desquiciante como la realidad del empleo, la vivienda y la tenencia de las mejores tierras, usurpadas con legalidad, aunque ilegítimas, por apenas el 2.5 por ciento de la población total del país, calculada en ocho millones.
Las intendencias, aplastante mayoría colorada, se roban los royalties que entrega la binacional hidroeléctrica de Itaipú y los aportes del FONACIDE, que deben ser destinados a la educación y a la salud públicas. La usurpación de las arcas del Estado está sin frenos. Abdo Benítez autorizó prestar a privados, los fondos jubilatorios del Instituto de Previsión Social, formados con los aportes de empresarios y trabajadores. Esta semana, el mandatario presentará ante el Parlamento el Proyecto de Presupuesto General de la Nación para el año próximo, estimulado por una ostentosa bonificación a los funcionarios estatales, que ya está en curso.
Circula ahora, en plena campaña electoral, un listado de 16 mil personas que se presentan como ex empleados de Itaipú, aunque la mitad nunca habría pisado una oficina de la represa, mayoría activistas colorados y algunos liberales y de otras tiendas. En la acelerada búsqueda de recursos, exigen una millonaria indemnización al Estado. En la otra binacional energética, Yasireta, dirigida por el expresidente colorado Duarte Frutos, la demagogia y el acarreo de votos también se han activado con la entrega a familias vecinas, de mil 134 viviendas.
Un fiscal, designado para combatir el narcotráfico, apareció muerto en su vivienda días atrás. El segundo en similar función en pocos meses. Es tal el grado abyecto de la conducta de la administración nacional y de buena parte de la ciudadanía, que hasta ha entristecido y secado los deliciosos frutos de los mangos, esa frondosa planta de origen asiático, exitosamente adaptada en Paraguay desde décadas.