13.SEP.18 | Posta Porteña 1949

Brasil / La derrota histórica de los trabajadores y el proyecto nacional-desarrollista autónomo

Por IHU On-Line/ J. V.Santos

 

Entrevista a Mario Maestri, Brasil


Juan Vitor Santos Academia.edu 6 sept. 2018

 

 En las elecciones de este año, al contrario de aquella que ocurrió a principios de los años 1960, cuando Jânio Quadros fue elegido presidente de Brasil, "no tenemos ni siquiera un nacionalista radical como Leonel Brizola, con suficiente tope para llamar a la población a enfrentar el golpismo y el" imperialismo ", constata el historiador Mário Maestri a la IHU On-Line. Para él, "la rendición" del ex presidente Lula, en la ocasión de su arresto, "fue una especie de parodia -en negativo - del suicidio de Vargas". "Si el acto extremo de Getúlio levantó a la población indignada, la sumisión de Lula da Silva, proclamando su confianza en la justicia, tuvo consecuencias desastrosas para el movimiento social"

En la siguiente entrevista, concedida por e-mail, Maestri establece algunas relaciones entre el momento político del país desde el gobierno Vargas hasta los días de hoy.

"Entre la radicalización obrera y la Campaña de la Legalidad, en 1961, y los días actuales, hay el enorme abismo cavado por la derrota histórica de los trabajadores y populares y por la traición de sus direcciones. El propio proyecto nacional-desarrollista autónomo, apoyado en grandes empresas nacionales, orientado hacia el mercado interno, hoy superado en todos sentidos, fue abandonado por los gobiernos que siguieron a la llamada redemocratización de 1985, sin excepción ", lamenta. En las últimas décadas, subraya, "el énfasis ha sido el corte de los derechos y servicios sociales, a ser sustituidos por el mercado; la internacionalización de la economía y de la sociedad, y sobre todo las exportaciones. Estas últimas permiten la práctica de salarios deprimidos, ya que gran parte de la producción nacional se vende en el exterior”.

- IHU On-Line - ¿Cómo comprender el contexto político que culminó en la renuncia de Jânio Quadros?

- Mário Maestri - Cuando en la crisis mundial del capitalismo, en 1929, la producción industrial brasileña, concentrada en RJ y SP y, menos, en el RS, superaba la producción agroexportadora, sustentáculo de la República Vieja (1889-1930). La "Revolución de 1930", la Constituyente de 1934 y, sobre todo, el Golpe del Estado Novo, de 1937, sustituyeron al federalismo por la centralización exigida por el industrialismo. Estos fueron los tiempos de la construcción del Estado-nación brasileño. La "industrialización por sustitución de importaciones" se fortaleció con la II Guerra [1939-45] y la militarización de la industria europea y estadounidense, incapaces de abastecer en manufacturas el mercado de Brasil

El impulso industrialista fue financiado sobre todo por la transferencia de renta del campo a la ciudad, por la explotación de la mano de obra fabril, por los capitales nacionales disponibles. El Estado intervino fuertemente en la construcción de las infraestructuras e industrias de base, debido a la inexistencia de capitales nacionales privados para inversiones de gran volumen y larga duración. El nuevo orden autoritario-burgués concedió viejas y nuevas reivindicaciones a sectores del proletariado urbano, para mejor controlarlo y disciplinarlo; para fortalecer el mercado interior, etc. [“Populismo"]

Las condiciones del mundo del trabajo eran muy duras. Incluso el salario industrial se mantuvo cerca de lo necesario para satisfacer las necesidades mínimas de las familias trabajadoras. El PCB, principal organización obrera, bajo la hegemonía estalinista, defendía la sumisión del mundo del trabajo a la "burguesía nacional progresista", hasta el fin de los pretendidos restos feudales y desarrollo pleno del capitalismo en Brasil. Cualquier cosa con tal de "aumentar la torta para después de repartirlo". Bajo el nacional-desarrollismo autónomo burgués, la clase obrera jamás alcanzó una efectiva independencia político-ideológica, dominando las propuestas burguesas (colaboración de clases) y pecebistas (revolución por etapas)

En 1945, con el fin de la II Guerra, la producción capitalista mundial militarizada retomó la exportación de manufacturas y, sobre todo, de capitales. Ahora, había que exportar las fábricas y explotar a los trabajadores sur remunerados, recibiendo en rentas, dividendos, etc. Para ello, había que abatir definitivamente el "nacional-desarrollismo burgués" y someter el industrialismo nacional y el desarrollo del mercado interior.

En cuanto a la deposición de Vargas, en 1945, el desarrollo burgués orientado hacia el mercado interno se encontraba en crisis tendencial. Para superar esta última, eran necesarios avances estructurales. Vargas achicará el latifundio, que limitaba el mercado interno y el avance del capitalismo en el campo. Era necesario la ampliación de las grandes empresas públicas infraestructurales - petróleo, electricidad, acero, ferrocarriles, puertos, etc. Se impusieron la construcción de tecnología nacional y la extensión de las leyes laborales al campo. Los salarios del campo y de la ciudad y la productividad del trabajo debían avanzar.

Por un lado, esas medidas chocaban con la ofensiva estadounidense, aliada al latifundio de exportación y al entonces frágil capital financiero. El imperialismo anhelaba la privatización de las empresas públicas; la internacionalización del mercado, las materias primas, la producción industrial, el sistema bancario nacional, etc. Por otra, la burguesía industrial brasileña, la gran privilegiada del "nacional-desarrollismo autónomo", temía que esas medidas aumentaran el poder de los trabajadores, ya en fortalecimiento. Preferían aceptar el tacón imperialista y abandonar la lucha por capitalismo nacional autónomo. Reforzaban así el carácter semicolonial de la nación

Por su pusilanimidad social, la burguesía industrial brasileña se mostró incapaz de acaudillar el desarrollo nacional autónomo. El comando de aquel proceso pasó a las clases trabajadoras, a concretarse en el contexto de modificaciones sociales, económicas y políticas estructurales. Para ello, los trabajadores debían construirse en la dirección acorde y conquistar autonomía política e ideológica.

Aniquilándose bajo las alas del imperialismo, incapaces de construir su hegemonía, el empresariado industrial optó por la solución golpista. Los trabajadores de la ciudad y del campo se enfrentaban ahora con la alianza de todas las clases dominantes del país al capital internacional. En agosto de 1954, el primer gran brote golpista fracasó con el retroceso del alto mando militar ante la explosión popular motivada por el suicidio de Vargas.

Las tentativas de golpes se repetirían, hasta la victoria en 1964, que en 1967 se desvió de la línea ideal delineada por el imperialismo


- IHU On-Line - ¿Qué relaciones podemos establecer entre la renuncia de Jânio Quadros y luego el Movimiento de la Legalidad, y el actual momento político de Brasil?

- Mário Maestri - En un momento en que la fuerza popular-electoral del PTB tendía a superar la del PSD, de pies y manos atados por el laborismo y el pecebismo, los trabajadores eligieron a Juscelino Kubitschek - JK - Jango, en 1955 - en aquel pleito, el vicepresidente Petebista ¡tuvo más votos que el candidato a la presidencia! Juscelino Kubitschek abrió amplias brechas en el proyecto de "capitalismo nacional autónomo", al facilitar el ingreso en el país del capital monopólico, con destaque para la industria automovilística. Impulsó el al industrialismo con financiamiento inflacionario, motivando enormes pérdidas a la economía popular y agrietamiento de los movimientos huelguistas. Se fortalecía la organización y la conciencia de los trabajadores.

Para el imperialismo y el conservadurismo nacional, se imponía con urgencia la destrucción del "desarrollismo burgués hacia el mercado interno" y de las organizaciones y partidos obreros

En el bloque conservador y el imperialismo, Jânio Quadros, político conservador, se eligió con campaña populista-demagógica, que prometía sobre todo la lucha contra la corrupción -el símbolo de campaña era la "escoba" y la consigna, "Jânio viene ahí”, que nada decía, como nada dice el repetido actual "Ciro Gomes viene ahí!". Juan Goulart, laborista, de la chapa concurrente, fue elegido vicepresidente, como permitía la legislación de a continuación. Su fluvial votación mostraba que Jânio Quadros navegaba con escaso lastre, que perdió en los primeros meses de administración sin rumbo

Jânio Quadros mandó a Goulart a la China comunista y entregó una carta de dimisión a los ministros militares, esperando que ellos apoyaran su pretensión de gobernar por la página 3 de 7 decretos, en el estilo "gaulista", para imponer la reestructuración liberal-conservadora. Sabía que los militares no aceptarían la asunción constitucional del vicepresidente João Goulart. Ya sin la confianza del imperialismo y de la derecha nacional, Jânio vio a los ministros militares entregar la carta de renuncia al presidente del Congreso y vetar la posesión de João Goulart. Los generales navegaban hacia el golpe militar, abierto o encubierto, bordeando la costa, sin enfrentar el alto mar, resabiados con el levantamiento popular de agosto de 1954. Temían la furia de los trabajadores

- IHU On-Line - ¿De qué forma el movimiento de la Legalidad emerge como resistencia y lo que estaba detrás de la idea de "legalidad", lograda por Leonel Brizola?

- Mário Maestri - El levantamiento popular de agosto de 1954 no tenía dirección. Vargas, el mayor líder nacional-burgués brasileño, preferiría poner fin a su vida a llamar a los trabajadores en su defensa. También temía la movilización autónoma de las masas populares.

En agosto de 1961, por los azares de la suerte y de la historia, la oposición popular al golpe encontró liderazgo en el gobernador laborista río-grandense. Leonel Brizola, con 39 años, radicalizó el proyecto nacional-desarrollista en el estado sureño: ensayó la reforma agraria; expandió los bancos públicos regionales; nacionalizó las infraestructuras básicas -teléfono, electricidad, agua, etc.

Brizola dijo no, y se preparó para lo que diera y viniera. Movilizó la todavía fuerte Brigada Militar; llamó a la población regional y nacional a la resistencia; se apoyó en los suboficiales nacionalistas y progresistas, que barrieron a sus oficiales golpistas, con las armas en las manos; distribuyó revólveres a la población. Sin otra solución, presionada por la tropa, el mando del poderoso III Ejército se adhirió al constitucionalismo. Brizola defendía la "legalidad" constitucional, o sea, la posesión de João Goulart, su cuñado

Exigía, sin embargo, la renuncia del Congreso, que se adhiera con gusto al golpismo, a una nueva Constitución, a la limpieza general de las fuerzas armadas. Una columna militar cruzaba ya la frontera surina para atacar a los golpistas cuando João Goulart accedió a las exigencias de apaciguamiento de los derrotados por la Legalidad. Asumió el gobierno castrado por orden parlamentario sacado de la cartulina del conservadurismo. Profundamente ingrato, se esforzó para dejar a Brizola, ahora líder del nacionalismo radical, alejado del nuevo orden. Prácticamente fue forzado a aterrizar, de viaje al centro del país, en el Estado que le garantizaba la supervivencia.

Lo que no avanza, retrocede. En el nuevo gobierno, todo quedó como "antes, en el cuartel de Abrantes" y, tres años más tarde, los golpistas militares y civiles asaltaron y mantuvieron el poder por 21 años, modificando estructuralmente el país, en detrimento de la población y de los trabajadores. Goulart justificó su deserción sin lucha, con la propuesta de no querer "derramar sangre". La población brasileña sigue pagando, hasta hoy, la acción del líder de farsa, granjero rico y bonachão, travestido de líder popular y laborista

- IHU On-Line - El PTB, a principios de los años 1960, sufría con disputas internas de dos alas, una más conservadora y otra más a la izquierda. ¿Qué estaba detrás de esas disputas y lo que llevó a la "racha"?

- Mário Maestri - El PTB fue creado por Vargas, en mayo de 1945, para mantener la hegemonía nacional-populista sobre los trabajadores urbanos, bajo la égida del sindicalismo oficial corporativista del Estado Nuevo [1937-45]. Nunca hubo trabajadores entre los grandes líderes nacionales petebistas. El PTB se dividió, grosso modo, en dos grandes facciones, la radical, que tenía Leonel Brizola como principal dirección, y la de la izquierda, conservadora, capitaneada por João Goulart. Las disidencias de derecha, como el Movimiento Laborista Renovador, de 1954, de Fernando Ferrari, registraron la radicalización de las bases obreras del viejo PTB de Getúlio Vargas. El PCB comenzó a dividirse, en los meses anteriores al golpe, en ala derechista, bajo el mando de Prestes, y en sector más a la izquierda, el "Grupo Bahiano", de Mário Alves, Jacob Gorender, Marighella etcétera

- IHU On-Line - Brasil, al igual que el mundo, vive un momento que ha sido llamado "crisis de la izquierda". ¿En qué consiste esa crisis y cómo se llegó a ella?

- Mário Maestri - La llamada "crisis de la izquierda" tiene momento crítico en la derrota histórica del mundo del trabajo, cuando el tsunami neoliberal mundial de fines de los años 1989, que terminó largo movimiento de avance de la revolución mundial, entonces retroceso. La recuperación general de las áreas liberadas de la explotación capitalista en más de setenta años de lucha motivó un enorme retroceso objetivo y subjetivo del mundo del trabajo, que pasó a no creer más en su programa como solución de los problemas sociales. El mundo del trabajo se hundió en una profunda crisis de "subjetividad"

Jamás existió "izquierda", en lo singular, sino "izquierdas", en plural, con eventuales facetas aparentemente convergentes, pero con núcleos sociales y programáticos en general contradictorios. En el nuevo contexto árido, de fragilidad política, social e ideológica de los trabajadores, propuestas de ordenamiento, de reforma, de retoques, de perennidad, etc. de la sociedad capitalista, y no de su superación, dominaron el corazón de la llamada izquierda - Economía Solidaria, ONG, foros mundiales, políticas compensatorias, discriminación positiva, cuotas, etc. Propuestas "identitarias" - raza, género, etc. - pasaron a habitar el corazón programático de la "izquierda", silenciando aún más la ya débil voz de los trabajadores

- IHU On-Line - Podemos asociar la "racha" del PTB, que, entre otras consecuencias, originó la creación del PDT, a las disputas internas del PT, que hasta 2004 capitaneaba a la izquierda nacional y desde entonces abrió espacio para la creación de derivaciones como el PSOL? ¿Por qué?

- Mário Maestri - A la verdad, no hubo "racha" del PTB. En 1980, la justicia, obediente a la dictadura, entregó la leyenda a Ivete Vargas, política de alquiler, para debilitar la refundación del laborismo ensayada por Brizola. Aquella reconstrucción se mostró imposible, pues el PT ocupaba entonces el corazón político del nuevo sindicalismo.

El caso del PT, partido del cual participé, cuando su fundación, es más complejo. Nació de las grandes movilizaciones obreras de fines de los años 1970, cuando, creo, por primera vez en nuestra historia, los trabajadores gozaron de autonomía político-ideológica tendencial. Un movimiento que se frustró debido al retroceso de las luchas sindicales en los años siguientes y al referido tsunami neoliberal de fines de los años 1989. Entonces, a través del mundo, partidos obreros, organizaciones sindicales se reciclaron e intelectuales y políticos de izquierda, etc. saltaron al otro lado de la trinchera o se dedicaron al goce de los beneficios de la administración del Estado en favor de las clases dominantes

El PT conoció también esa metamorfosis, transformándose, primero, en organización de orientación social-democrática y, muy pronta, en agremiación de sesgo social-liberal. En la dirección de políticos y sindicalistas como Lula da Silva, José Dirceu, Palocci, Mantega, Luiz Gushiken, Marco Aurelio García, etc., el PT rompió con su propuesta original de transformar y no gestionar el orden capitalista. De partido con raíces en el movimiento sindical y popular, evoluciona hacia la organización de políticos profesionales, administradores y burócratas, orientados por intereses particulares, por no decir más, en muchos casos

El primer gobierno Lula da Silva prometió al gran capital la ejecución de las reformas de la previsión pública, laboral y tributaria, contra el interés de los trabajadores. La masacre del sistema de previsión de los funcionarios públicos dio lugar a la ruptura y organización del PSOL en 2004. También participé en la fundación de ese partido que emprendió el mismo rompimiento realizado por el PT con sus bases, transformándose también en partido donde conviven tendencias de las más diversas orientaciones, no raramente opuestas, en general interesadas en elegir parlamentarios y extrañas al programa obrero

- IHU On-Line - Las elecciones de 2018 han sido proyectadas por analistas como un momento único, pues cualquiera que salga victorioso tendrá grandes desafíos para viabilizar su gobierno. ¿Cómo ha observado el escenario actual? ¿Vivimos la inminencia de un "acuerdo parlamentario"?

- Mário Maestri - Bajo la orientación del imperialismo, los grandes medios, la justicia y el alto mando militar, involucrados en el golpe institucional, simplemente decidieron quién podía y quién no podía participar en las elecciones. Todo para dejar a Lula da Silva fuera de los comicios, ya que su elección desorganizaría el golpe. Se pretendía originalmente casar la leyenda petista como "organización criminal". Los resultados de las elecciones de 2018 serán una enorme farsa, que tiene como principal objetivo legitimar el golpe y la inmensa y despiadada rapiña que ha sufrido nuestra nación y población. La inevitable mayoría conservadora en la Cámara y en el Senado ya garantiza de por sí la continuidad de la reorganización golpista del país.

A diferencia de 1961, no tenemos ni siquiera un nacionalista radical como Leonel Brizola, con suficiente tope para llamar a la población a enfrentar el golpismo y el imperialismo. La rendición de Lula da Silva, cuando de su prisión, sin resistencia, en un momento en que trabajadores afluían, a los miles, para defenderlo, fue una especie de parodia - en negativo - del suicidio de Vargas. Si el acto extremo de Getúlio levantó a la población indignada, la sumisión de Lula da Silva, proclamando su confianza en la justicia, tuvo consecuencias desastrosas para el movimiento social. Lula temió desafiar a los poderosos y, sobre todo, poner a los trabajadores y a la población en marcha. Ahora, presenta como su sustituto Fernando Haddad, híbrido petista-peessedebista. El 10 de agosto de 2016, cuando la población intentaba resistir la ofensiva derechista, Haddad declaró que "Golpe" era "una palabra un poco dura, que recordaba la dictadura militar"

Sin embargo, lo que vivimos hoy es ciertamente mucho peor que el orden militar post-1967 que, al menos, ha ampliado el área pública y la clase trabajadora. En agosto pasado, propuso que Venezuela y Nicaragua, bajo el ataque directo del imperialismo, no pueden ser caracterizadas como "democracias". En caso de ser elegido, tal vez tendremos el propuesto "acuerdo parlamentario", al que, como João Goulart, el profesor paulista ciertamente no se opondrá, en nombre de la conciliación. Sin embargo, las elecciones son todavía una caja de Pandora, que se mantiene semicerrada, guardando maldades sin fin.

- IHU On-Line - En un espectro político más amplio, ¿cuáles son los mayores reflejos de la Campaña de la Legalidad y la radicalización del PTB en la década de 1960 en el contexto actual?

- Mário Maestri - Entre la radicalización obrera y la Campaña de la Legalidad, en 1961, y los días actuales, hay el enorme abismo cavado por la derrota histórica de los trabajadores y populares y por la traición de sus direcciones. El propio proyecto nacional-desarrollista autónomo, apoyado en grandes empresas nacionales, orientado hacia el mercado interno, hoy superado en todos sentidos, fue abandonado por los gobiernos que siguieron a la llamada redemocratización de 1985, sin excepción. Desde entonces, el énfasis ha sido el corte de los derechos y servicios sociales, a ser sustituidos por el mercado; la internacionalización de la economía y de la sociedad, y sobre todo las exportaciones. Estas últimas permiten la práctica de salarios deprimidos, ya que gran parte de la producción nacional se vende en el exterior. De esa propuesta comulgaron los gobiernos Sarney, Collor, FHC, Lula da Silva y Dilma Rousseff. El programa actual del PT promete seguir en ese camino, tan al gusto del gran capital. Sin embargo, hoy, este último quiere mucho más, quiere poner fin a la tercerización y abogar el mando efectivo del país. Exige transición de orden semicolonial a un nuevo colonialismo globalizado, con desplazamiento pleno de las clases dominantes nacionales del mando de la nación

- IHU On-Line - ¿Cuáles son los desafíos y por donde pasa la idea de reinvención política en Brasil?

- Mário Maestri - Se impone de forma indiscutible la reinvención de política para Brasil, proyecto extremadamente complejo y difícil. Sin embargo, se impone el rechazo de los simplismos propagandísticos de la autoproclamada "izquierda revolucionaria", que exige "revolución proletaria", no raramente a nivel mundial, prácticamente como programa mínimo  Hay que combatir igualmente, de forma intransigente, el derrotismo y colaboracionismo criminales de las visiones desarrollistas que proponen emancipación social a través del desarrollo de la producción capitalista, que nos ha llevado al desastre actual

Tenemos que levantar un ambicioso "proyecto nacional independiente" que galvanice a la población brasileña, mostrándole salida posible, bajo la dirección confiable de las clases trabajadoras y populares organizadas. En ese sentido, la clase trabajadora debe asumir su destino de caudillo de la nación. Todo, construido en sentido internacionalista, teniendo como etapa intermedia, por supuesto, la simpática propuesta del "osito" de la URSAL, por supuesto.

Corresponsal Namberuán


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