09.JUN.21 | PostaPorteña 2210

VIEJOS TIEMPOS...

Por Marioquito Martínez

 

Las brumas de los años pasados, nos han traído hasta este estado de "chiquero"  moral, donde todo es impunidad, medias verdades, transas disfrazadas de heroísmos novelescos, o héroes de currículos inventados por promocionados "historiadores", casi siempre basados en testimonios de esos mismos personajes, a los cuales dieran vida sus también promocionadas "investigaciones".


Es así como nos cuentan, a unos cuantos viejos de hoy, el porqué y el cómo, de aquellas nuestras rebeldías jóvenes de los años 60...   

 Al parecer nos sonó el despertador de un más que lejano "mayo del 68" allá  por las rues del lejano París, aunque para algunos de nosotros, los Boulevares que recorríamos eran los de "Coprin",  cierres de fábricas y talleres; medidas de seguridad; represión y corrupción total de la clase gobernante.

Lo de "obreros y estudiantes, unidos y ..." no fue un eslogan para movilizar gente, fue el grito del codo con codo en las calles, en las ocupaciones o en las "relámpagos" que como tales surgían por todos lados...

Trabajadores "militarizados" internados en cuarteles; despidos de huelguistas por ejercer sus derechos; reclusiones en cuarteles decretadas por el poder ejecutivo sin tomar en cuenta fallos de la justicia; muertes en las calles bajo balas policiales amparadas por "medidas de seguridad"; expulsiones fuera de fronteras bajo la sola decisión del ejecutivo; represión y represión, no solamente cuando te movilizabas y protestabas, las razzias eran sistemáticas los viernes y sábados a la noche, donde nos acarreaban a las comisarías en ómnibus que la siempre "solidaria CUTCSA" ponía al servicio de los amables "ratis", pagos por el pueblo, para luchar contra la delincuencia. 

 Todo eso fue vivido por la población de los barrios humildes de nuestro Montevideo;  pero al presente,  mucha sucia tinta trata de enchastrar una realidad incuestionable.  Los derechos son respetados solo si sabes defenderlos... y eso fue lo que se intentó

 No tiramos la primera piedra, ni dimos la trompada inicial, solo empezamos a devolver golpe por golpe, justamente a aquellos que se creían solos propietarios de eso que llamaban "derechos ciudadanos"

Nuestra rebeldía no nació dentro de organización alguna, primero fuimos pisoteados como trabajadores, luego reprimidos como pacíficos manifestantes, calaboceados por estar conversando en una esquina o por "ser y estar"...

Varias veces he escuchado a periodistas señalar como el inicio de la violencia "anticonstitucional", al accionar del MLN, como si el MLN estuviera compuesto por cuerpos extraños, ajenos a aquella realidad en que vivíamos, y al parecer de estos sectores, no teníamos el derecho a la "defensa propia", a pesar que ya no nos quedaban más mejillas que poner.

 Otros colores pintan aquellas luchas, algunos tan fantásticos como la versión de un General Seregni orquestando la creación de lo que comenzó siendo un frente de "independientes", fuera de la Órbita de una izquierda de cúpulas divididas, para que en su fuerte crecimiento popular barriera viejas reticencias, concretando el nacimiento del viejo Frente Amplio. 

 Otros dicen que "al fin", luego de varios llamados fallidos del PDC a la unidad de la "izquierda democrática", la "clase" política lo logró...  bueno vivimos todos otra  cosa, solo miles de Orientales en las calles, fábricas, centros de estudios y clubes barriales barrieron con años de sectarismo y caudillaje...


No fue para nada fácil, muchas ganas, fuerza y noches en vela, poca gente con experiencia, mucha pero mucha humildad, escuchar a los más experimentados; nuestro mayor homenaje a Don Héctor Rodríguez, inmenso con su paciencia y sabiduría, al igual que nuestros viejos vecinos anarcos, los hermanos Portela, profesores-compañeros de la práctica en el día a día...   

 Tampoco fue orgánicamente que muchos compañeros participaron en ese día a día tan acelerado de los 69-70,  solo recién a mediados de este último año, se comenzó a compartir diversas vivencias, tratando de salvaguardar en parte la compartimentación. 

No es lo dicho por Amodio, que aunque ya pasado medio siglo, sigue con su prédica de elite, que el MLN eran 10 o 15 decididores, Amodio entre ellos entre ellos, que nos llevaron a la peor de las derrotas, no solo al MLN, si no también a todo el movimiento popular, cosa que estos personajes, desconocieron olímpicamente, unos creyéndose indestructibles, otros colaborando para salvar sus pellejos mientras que Compañeros dejaban sus vidas en las salas de torturas o cazados como irrecuperables por informaciones dadas por estos traidores.
     

Nuestra mayor derrota es ver hoy, aquello que tanto costó lograr, transformado en caricatura siniestra, una fauna de arribistas que arriaron todas las principales banderas que tanto se trabajó para levantar, y para peor, ver a hoy, ya viejos gurises de entonces, que veían el viejo FA como no suficientemente "revolucionario", y no querían otra cosa que tirar algún coctelito, pintar la estrella de 5 puntas o participar en alguna relámpago, andar  abrazados a la bandera que representa la "contra reforma agraria", la multiplicación del endeudamiento y el religioso pago de la deuda externa; una salud para pobres y otra para ricos; el mantenimiento de todos los privilegios de la clase política; y la frutilla de la torta, la impunidad de muchos de quienes asesinaron a nuestros compañeros...  al parecer pueden mucho más  los pesos de unas pensiones y compensaciones otorgadas que aquellas ideas que sacudieron la siesta de el "país con la cola de paja"

Marioquito Martínez


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